Volkswagen ha dado a conocer la nueva imagen de su SUV más urbano, el T-Cross, modelo que recibe una actualización en su carrocería, diseño interior y también una mayor carga tecnológica. También se ha podido saber que este superventas del renting, que se podrá reservar antes de finales de año y que comenzará su comercialización en los primeros meses de 2024, va a seguir a la venta solamente con motores de gasolina, de modo que no va a estar disponible con ningún sistema de electrificación ni de hibridación.
Este atractivo todocamino que se produce en la planta del Grupo Volkswagen en Pamplona se pone al día para seguir siendo competitivo en un segmento muy poblado y disputado con rivales como el Citroën C3 Aircross, Hyundai Kona, Peugeot 2008 o Renault Captur, por poner solo unos pocos ejemplos. Las novedades de mayor calado las vamos a encontrar en el frontal, con una parrilla de nuevo cuño y unos faros LED de nueva factura integrados, de serie en toda la gama. También son novedad los rediseñados parachoques delantero y trasero y en la zaga los grupos ópticos con tecnología LED. Por primera vez estarán disponibles los faros LED matriciales IQ.Light. Además, el T-Cross estrena nuevos colores de carrocería, entre los que destaca un llamativo tono amarillo denominado Grape, al que hay que sumar dos tonalidades metalizadas, una azul claro y la otra roja.
Con Digital Cockpit
En el interior se puede apreciar la presencia de nuevos materiales que permiten aumentar la calidad percibida, entre ellos los que recubren el salpicadero, mullidos, mucho más agradables a la vista y al tacto. A destacar también su mayor dotación tecnológica, palpable en la nueva pantalla del centro del salpicadero, que en las versiones de acceso es de 8 pulgadas y en las mejor equipadas de 9,2. Por su parte, la instrumentación evoluciona al son de los modelos más recientes de la marca adoptando el conocido como Digital Cockpit, con una pantalla que según las versiones puede ser de 8 o de 10 pulgadas.
Algo que no cambia es su buen espacio interior, uno de los mejores de su segmento, así como su modularidad, fundamentada en la banqueta trasera deslizable longitudinalmente 14 cm. También mantiene la capacidad de carga del maletero, que va de 385 litros con los asientos traseros retrasados al máximo, hasta los 455 litros si se colocan en su posición más adelantada. Si abatimos sus respaldos el volumen de carga aumenta hasta 1.280 litros.
Otra solución que mejora su modularidad interior es la posibilidad de abatir hacia adelante el respaldo del asiento del acompañante, de serie a partir de nivel de acabado Life, brindando con ello la posibilidad de transportar objetos de hasta 2,40 metros de longitud. También se ha mejorado la carga vertical que puede soportar el gancho para el remolque, que pasa de 55 a 75 kilos, mejorando de paso el peso máximo autorizado para el portabicicletas, que ahora es más apto para transportar bicis eléctricas.
Con el mejor asistente
En el capítulo de seguridad, el Volkswagen T-Cross es uno de los pocos vehículos de su segmento que puede equipar, opcionalmente, el Travel Assist para un mejor control longitudinal y lateral del coche. Dependiendo del tráfico que haya por delante y de la velocidad permitida, puede gestionar la velocidad acelerando o frenando de manera automática. El Travel Assist también puede incluir límites de velocidad, curvas y rotondas en sus intervenciones de control. Por su parte, el Lane Assist ayuda a mantener el vehículo en su carril y el coche puede realizar automáticamente operaciones de parada y arranque cuando está equipado con el cambio automático DSG.
Volkswagen no ha dado a conocer las motorizaciones definitivas disponibles en este renovado T-Cross, pero lo que es seguro es que seguirá estando disponible con los motores TSI, por lo que no se tiene previsto ningún tipo de electrificación ni de hibridación. Lo que también ha anunciado la marca es que este SUV urbano tendrá un precio muy competitivo en sus cuatro niveles de acabado: básico, Life, Style y R-Line.