Siguiendo con el plan de renovación de sus distintos modelos, Skoda actualiza sus opciones más urbanas, el Kamiq y el Scala, que tras cuatro años en el mercado se presentan ahora con una estética remozada, materiales más ecológicos en su realización, mejoras tecnológicas y, curiosamente, con los mismos propulsores TSI sin ningún tipo de electrificación, por lo que ambos nos van a ir más allá de la etiqueta C de la DGT. Su aterrizaje en los concesionarios de la marca está previsto para el próximo mes de marzo.
Comenzamos por el Kamiq, un modelo muy importante para Skoda al tratarse de su SUV más vendido y estar integrado en el segmento de mayor crecimiento del mercado. Las modificaciones estéticas realizadas no son muy profundas, encontrando las principales en el frontal, con una rejilla un poco más grande y un parachoques con entradas de aire igualmente de un tamaño superior. También son de nueva factura los faros, que se han redimensionado y ahora por primera vez pueden disponer de tecnología Matrix Top LED. Por encima de ellos se ubica el modulo de iluminación diurna, más estilizado que en su antecesor.
En la parte trasera las novedades son de menor calado. Por apuntar algo, los grupos ópticos, que mantienen el mismo diseño, han variado la distribución de sus funciones. Sí que se incluyen llantas de nuevo diseño con diámetros de 17 y 18 pulgadas, mientras que la paleta de colores de la carrocería suma en total nueve tonos, dos de ellos sólidos, seis metalizados y el exclusivo Phoenix Orange metalizado. Además, la marca ofrece mayores posibilidades de personalización con la posibilidad de elegir el montante del parabrisas y el techo pintados de color negro, combinables con distintos colores de carrocería.
Materiales sostenibles y Virtual Cockpit
En el interior los cambios son también sutiles. Cabe destacar la mayor presencia de materiales ecológicos y sostenibles, como es el caso de la fibra vegetal que se utiliza en el guarnecido de las puertas o los tejidos reciclados empleados en la tapicería o en el recubrimiento del suelo, por poner unos pocos ejemplos. La mejora de la dotación tecnológica queda encabezada por una nueva instrumentación digital de 8 pulgadas, que en opción se puede sustituir por el Virtual Cockpit de 10,25 pulgadas. La pantalla central del sistema multimedia puede ser, en función del nivel de equipamiento, de 8,25 o de 9,2 pulgadas, ambas compatibles con Android Auto, Apple CarPlay y con el reconocimiento de voz Laura. La más grande de las dos, vinculada a los niveles de acabado más altos, permite actualizaciones del navegador de manera inalámbrica (OTA).
Skoda ofrece este nuevo Kamiq con cuatro niveles de acabado: Essence, Selection, Design y Monte Carlo. Todos ellos cuentan con un completo equipamiento de serie en todos los aspectos, incluido el de las ayudas a la conducción (ADAS) con la adopción de los sistemas más evolucionados de la marcha checa y presentes en sus modelos más novedosos.
Fiel al TSI (sin electrificar)
La gama de motores es muy similar a la de su antecesor, mostrando su fidelidad a los propulsores gasolina TSI si bien de la nueva generación evo2, que según la marca cumplen con la normativa Euro7, que aún no ha sido aprobada. Curiosamente, y a diferencia de las soluciones que están empleando otros fabricantes, Skoda no contempla ningún tipo de electrificación en estos motores, por lo tanto siguen disponiendo de etiqueta medioambiental C de la DGT.
Para el Kamiq están disponibles los TSI de tres cilindros de un litro de capacidad con potencias de 95 y 115 CV, este último combinable tanto con una caja de cambios manual de seis velocidades como con la automática DSG de siete relaciones, y el TSI de cuatro cilindros de 1.5 litros de 150 CV con el sistema ACT de desconexión de cilindros, propulsor que se puede asociar a los dos tipos de transmisión.
Lo mismo para el Scala
En el caso del práctico Scala, el turismo compacto de Skoda de cinco puertas y 4,36 metros de longitud, los cambios introducidos van en la misma línea del Kamiq. Estéticamente, las novedades más importantes se encuentran en el frontal, destacando la rejilla de mayor tamaño y ahora, como en los SUV de la marca, con lamas verticales. El parachoques también ha sido rediseñado y cuenta con unas tomas de refrigeración de mayor tamaño, contribuyendo a darle al coche un aspecto más robusto y agresivo. También se ponen a disposición de su conductor los faros con tecnología Matrix Top LED.
En la zaga se puede apreciar un paragolpes de nuevo diseño que incluye un difusor enmarcado por unos elementos en forma de ala pintados en el mismo color que la carrocería. Otra novedad es el nuevo diseño de las llantas, que pueden tener un tamaño de 16 a 18 pulgadas.
En el interior, tal como ocurre en el nuevo Kamiq, la firma checa recurre en mayor medida a materiales ecológicos y sostenibles e introduce la instrumentación Virtual Cockpit de 10,25 pulgadas, junto a una pantalla central igualmente de 8,25 o 9,2 pulgadas. En opción puede estar dotado con el paquete Technology Plus con un mayor número de puertos USB o con la superficie Phone Box que permite cargar los smartphones con un sistema de inducción compatible. En el caso del Scala, Skoda lo comercializa bajo tres niveles de acabado: Essence, Selection y Monte Carlo.
Las opciones mecánicas son similares a la del Kamiq, al igual que las suspensiones, que a las montadas de serie suman dos opcionales: una con una altura libre al suelo aumentada en 15 milímetros, recomendada para carreteras en mal estado, y otra con el control de chasis deportivo con dos niveles de firmeza.