El 67,9% de las ciudades españolas de más de 50.000 habitantes cuenta ya con zonas de movilidad restringida y el 77% de los municipios ha dado pasos hacia el cumplimiento de la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, según un informe de la Asociación de Fabricantes y Distribuidores (Aecoc), realizado en colaboración con la Federación Española de Municipios y Provincias (Femp).
El estudio, que analiza el camino recorrido por las ciudades para cumplir con la ley y sus principales apuestas para generar un modelo de movilidad urbana más digital y sostenible, asegura que de las 149 ciudades españolas de más de 50.000 habitantes obligadas a habilitar Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) a partir de 2023, solo el 9,4% lo ha hecho, mientras que en el lado opuesto, el 22,6% no ha iniciado ninguna acción.
Los datos, dados a conocer ayer, 7 de julio, por el responsable de Movilidad de Aecoc, José Carlos Espeso, durante la primera jornada del II Congreso de Smart Distribution de la asociación, ponen de manifiesto que 9 de cada 10 ciudades tienen previsto crear una ZBE y, de hecho, el 62% ya está elaborando un calendario para restringir gradualmente el acceso de vehículos contaminantes a sus núcleos urbanos. A estas hay que sumar el 11% que ya tiene diseñado este calendario de restricciones a la movilidad.
Libertad de criterio
El estudio confirma la importancia que los municipios dan al mantenimiento de sus competencias en regulación de la movilidad dentro de los mismos, por lo que 6 de cada 10 se declaran contrarios a unificar los criterios en el acceso de vehículos. En este sentido, José Carlos Espeso explica que «los municipios tienen una gran predisposición a colaborar con las empresas para diseñar conjuntamente estrategias que favorezcan el cumplimiento de las normativas sobre sostenibilidad sin impactar en exceso la actividad empresarial en sus núcleos urbanos. Sin embargo, la armonización de las leyes de acceso a los municipios resulta indispensable para evitar una multiplicidad legislativa que complicaría las operaciones de logística urbana, rompería con la necesaria unidad de mercado y afectaría a la competitividad empresarial”.
Tres estrategias apuntan las ciudades como acciones prioritarias para crear un modelo de distribución urbana de mercancías más digital y sostenible: digitalización de las zonas de carga y descarga, digitalización de los propios municipios e impulso de la logística nocturna y en horas valle.
Por otra parte, a causa de la mayor demanda de bicicletas, motos y patines eléctricos en la distribución urbana de mercancías, el estudio adelanta que el 47% de los municipios están valorando regular la movilidad de estos vehículos en sus centros.
Sostenibilidad y última milla
Durante la inauguración del congreso, el director de Cadena de Suministro de Aecoc, Alejandro Sánchez, ha resaltado la importancia de la sostenibilidad en las decisiones de compra de los consumidores y en las estrategias empresariales, al asegurar que «el respeto por el medio ambiente es un elemento de valor para los ciudadanos y es ya una obligación para las empresas”. Por ello, ha reclamado apoyo administrativo para que estas puedan acometer la transición hacia modelos de movilidad más sostenibles y ha apuntado a los Fondos Next Generation como «una palanca que acelere ese camino hacia la sostenibilidad, pero pueden ser insuficientes para acometer la renovación de las flotas de vehículos y el resto de ejes sostenibles que tienen que ver con la logística, como la mejora de la eficiencia energética en los almacenes».
Finalmente, Sánchez ha destacado el rol transformador del ecommerce, que debe conjugar sostenibilidad y rentabilidad, y ha puntualizado que «cada día se entregan un millón y medio de paquetes y, en la última milla, las empresas se juegan entre el 14% y el 20% del coste del servicio. Es necesario trabajar en la optimización de rutas, la alta ocupación de los vehículos, el uso de transportes no contaminantes y la extensión, tanto de redes urbanas de taquillas como de zonas de carga y descarga de alta rotación”.
