Rehabilitar y dar una segunda vida a los vehículos usados en respuesta a los ambiciosos objetivos marcados por el grupo en cuanto a la calidad y sostenibilidad de sus productos, así como en lo relativo a la reducción de sus emisiones de carbono. Este es el objetivo que persigue el proyecto de economía circular ReFactory para la planta sevillana de Renault inaugurado hoy, 5 de noviembre, por el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, y el director industrial de Renault Group y presidente director general de Renault en España, José Vicente de los Mozos.
Como continuación del primer proyecto de estas características puesto en marcha en la factoría de Flins (Francia) a finales del año pasado, los procesos de rehabilitación de vehículos usados arrancarán en las instalaciones andaluzas de la marca del rombo en el último cuatrimestre de 2022, bajo la perspectiva de poder colocar en el mercado de ocasión más de 10.000 unidades anuales de calidad premium a precios competitivos a partir del año 2025, además de poder reacondicionar hasta 1.000 baterías anualmente.
Cuatro líneas
El que se va a convertir en el primer proyecto de economía circular dedicado de forma integral a la movilidad en España estructurará su actividad, inicialmente, en torno a cuatro líneas que acompañarán toda la vita útil del vehículo.
La primera, denominada Re-Trofit, reunirá todas las actividades necesarias para el reacondicionamiento de vehículos usados de particulares y flotas, lo que permitirá darles una segunda vida y alargar su vida útil. Esta será la actividad que dé comienzo en el último cuatrimestre del año que viene. Tras un lavado exhaustivo, este proceso comienza a desarrollarse desde el peritaje de los daños del vehículo, lo que va a permitir lanzar ya en ese momento el pedido de las piezas que serán necesarias para su reparación.
A continuación, se iniciará la reparación integral de la mecánica del vehículo para posteriormente hacer una revisión de 100 puntos de control, además de la gestión de la ITV. Una vez concluidos todos estos pasos se procederá a la renovación de la carrocería y, por supuesto, a la realización de un exhaustivo control de calidad.
El ciclo termina con una nueva limpieza exhaustiva y un reportaje de fotográfico y de vídeo, como pasos previos al estocaje o al transporte. Los vehículos que pasan por esta instalación obtendrán la Certificación ReFactory, que supone haber utilizado piezas de la marca, superar el programa de mantenimiento del constructor y pasar un exhaustivo control de calidad.
La segunda, Re-Energy, se concentrará en reparar las baterías de vehículos eléctricos en uso, desarrollando aplicaciones en la segunda vida de los módulos que ya no sean operativos para el vehículo, pero que puedan utilizarse para el almacenamiento estacionario de energía, y la gestión del final de su vida útil.
Re-Cycle es el nombre de la tercera línea, que contribuirá a una gestión eficiente de los recursos y del flujo de suministro de piezas y materiales, colaborando con el objetivo de Renault Group de aumentar la cuota de materiales reciclados o reutilizados.
Esta línea comenzará su actividad en 2024, al igual que la cuarta, Re-Start, que promoverá e identificará nuevas actividades que permitan continuar innovando en materia de economía circular, además de desarrollar la formación de nuevas competencias. Así, ReFactory de Sevilla será un ecosistema abierto en el que en colaboración con la factoría francesa de Flins, el Centro I+D+i de Valladolid, diferentes socios, startups y centros universitarios permitirá acelerar la investigación y la formación sobre la movilidad del futuro.