El Opel Frontera fue un robusto todoterreno de la década de los 90 del siglo pasado, un vehículo duro y resistente que hoy en día se puede ver todavía circulando en zonas rurales. Pues bien, la firma alemana recupera esa denominación aunque ya no se corresponde con el TT de aquella época, sino que identifica a un nuevo SUV de carácter urbano que marca el inicio de una nueva era en la historia de Opel. El inicio de su comercialización está previsto para después del próximo verano.
El Frontera llega para dar el relevo al Crossland y con el objetivo de hacerse un hueco importante entre los SUV de tipo urbano, segmento en el que la competencia es muy dura. Este nuevo modelo se beneficia de las sinergias del Grupo Stellantis, y en su caso Opel recurre a la plataforma y otros componentes técnicos que utiliza este potente grupo automovilista en los modelos de este segmento de sus diferentes marcas, como el Peugeot 2008, el Jeep Avenger, el Fiat 600 o el futuro Citroën C3 Aircross. El Frontera tendrá una longitud total entorno a 4,4 metros, cota que le permite navegar entre dos segmentos, el de los SUV-B más urbanos y el de los compactos SUV-C.
Diseño robusto y aventurero
Este nuevo Frontera muestra un aspecto mucho más agresivo y robusto que el Crossland y adopta el lenguaje de diseño más actual de la marca del rayo. El frontal, muy vertical, integra el nuevo diseño Vizor, presente en los modelos más novedosos de este fabricante, y como gran primicia lucirá en el centro el nuevo logotipo Blitz de Opel. Este diseño le confiere una personalidad muy diferente a la del resto de sus rivales, quedando rematado por la integración de los faros Eco LED con luz de carretera automática. En el lateral destaca el original pilar trasero y unos pronunciados pasos de rueda que contribuyen a darle al coche un aspecto solido y atlético.
Opel no ha desvelado todas sus medidas, pero asegura que tendrá un interior muy amplio. Como prueba de ello dan a conocer la capacidad del maletero, que será de 460 litros, volumen que aumenta hasta los 1.600 litros si se abaten los respaldos de los asientos traseros, configurados en una proporción de 60:40. Si se necesita llevar más equipaje se puede optar en opción por las barras longitudinales del techo, que pueden soportar una carga de más de 200 kilos.
Tal como ocurre con el diseño exterior de la carrocería, en el interior también se plasma una estética muy moderna y sobre todo práctica. El nuevo SUV de Opel está dotado con el conocido Pure Panel, que integra dos pantallas digitales de 10 pulgadas, una para la instrumentación y la otra para el sistema multimedia, que se ve complementado con algunas soluciones muy prácticas como es el caso del cargador inalámbrico refrigerado para el smartphone o múltiples conexiones USB para cargar y poder utilizar diferentes dispositivos móviles.
Prioridad a la electrificación
Desde la primera fase de su comercialización estará disponible con un sistema de propulsión cero emisiones, que si bien la marca alemana no ha comunicado datos ni de potencia ni de capacidad de batería, todo parece indicar que van a recurrir al que utilizan otros modelos de Stellantis, como es el caso del Peugeot 2008, el Jeep Avenger o el Fiat 600e, por poner unos ejemplos de SUV de este grupo automovilístico. Por lo tanto, se puede anticipar que puede estar animado por el electromotor de 156 CV (115 kW) y con una batería de 54 kWh de capacidad, con la que podría homologar un rango de uso de algo más de 400 km.
La gama se completará con versiones con motor térmico y con sistema microhíbrido de 48 V. Opel no ha dado a conocer aún datos técnicos sobre este sistema de propulsión MHEV, pero todo parece indicar que será similar al empleado en los modelos más novedosos de Stellantis. Por lo tanto, lo más lógico es que recurran al motor 1.2 de gasolina de tres litros asociado a una caja de cambios automática de seis velocidades y con un pequeño electromotor integrado en ella.
