Norauto, la cadena de mantenimiento integral del automóvil, se ha puesto manos a la obra para aclarar las principales dudas que sobre posventa y reparación de vehículos eléctricos puedan surgir a los usuarios. Sobre todo, ante la fuerte demanda que se espera para el año próximo, que tras la ampliación del Plan Moves con 225 millones de euros, se estima en 225.000 unidades y 100.000 puntos de recarga.
Así, ante la pregunta de si los coches eléctricos deben realizar más revisiones que los térmicos, Víctor Pardo, Market Manager y Proyectos Taller de Norauto, contesta con un rotundo no y señala que, en este capítulo, no hay diferencias, aunque la frecuencia de las mismas dependerá de cada marca. Cierto es que se revisan diferentes elementos en función del tipo de vehículo y que lo ideal es realizar una revisión en profundidad cada año, para mayor seguridad, y comprobar determinados elementos, como la batería, neumáticos, frenos, etcétera, antes de desplazamientos largos.
Asimismo, no hay motivo alguno para que un vehículo eléctrico sufra más averías que un coche gasolina o diésel. De hecho, los eléctricos puros o la parte eléctrica de los híbridos sufren menos averías si lo comparamos con un motor de combustión. Y en contra de lo que podría parecer, el mayor peso y par motor de los eléctricos no influye en los neumáticos, según diversos estudios.
Talleres y profesionales bien formados
Como todos los vehículos, en los eléctricos también hay que cambiar luces, frenos, neumáticos y filtro del habitáculo, entre otros elementos, si bien baterías y conectores de carga son averías específicas de este tipo de automóviles. Para ello, Norauto apunta que los profesionales que trabajan en sus talleres han recibido la formación necesaria para realizar el mantenimiento de vehículos híbridos y eléctricos y que sus instalaciones están adaptadas y cuentan con la tecnología necesaria. Por ejemplo, disponen de guantes aislantes, elementos de señalización o herramienta de mano aislada de 1.000 voltios. Recordemos que, repartidos por toda España, los 90 autocentros de Norauto puede hacer estos mantenimientos sin que el automóvil pierda la garantía del fabricante.
Básicamente, la revisión Norauto del vehículo eléctrico se basa en nueve controles específicos. Por un lado, se comprueba el refrigerante del motor y la batería y, por otro, el estado del cable de carga, así como los cables y fundas de los cables de alta tensión. Si es accesible, también se revisa el pack de baterías, el estado del conector de carga y se realiza un diagnóstico electrónico del pack de batería. Finalmente, se llevan a cabo tres controles técnicos para conocer el estado de salud de la batería de alta tensión, ya que las temperaturas extremas le afectan negativamente, como a cualquier tipo de batería.
Por lo general, las revisiones de vehículos eléctricos tienen un coste similar a la de los de combustión, ya que los talleres han ajustado mucho los precios y, además, tienen la ventaja de que suelen pasar menos por el taller, al tener menos averías. Entre las más costosas, la cadena de mantenimiento integral señala el cambio de batería, aunque con el paso del tiempo y la popularización de los precios disminuirá.
Como cualquier otro vehículo, el eléctrico debe pasar la ITV (Inspección Técnica de Vehículos), que se rige por la misma normativa de inspección, si bien no se somete a la prueba de emisiones, aunque los híbridos tienen que hacer la de ralentí. Teniendo esto en cuenta, Norauto afirma que sus centros están preparados para realizar la revisión del vehículo pre-ITV.
El aprendizaje
La electrificación está marcando el rumbo hacia una forma de movilidad más limpia, eficiente y sostenible, ya sea mediante coches, motos, patinetes o bicicletas eléctricas. Consciente de ello, Norauto promueve el uso de estos vehículos menos contaminantes, de forma que ciclomotores, patinetes y bicicletas eléctricas forman parte de los muchos medios que se pueden adquirir en sus autocentros y en su página web. Reflejo de este compromiso es la campaña «El aprendizaje», cuyo objetivo es hacer hincapié en la importancia de seguir avanzando juntos hacia una movilidad más eficiente y sostenible. La campaña se centra en cómo podemos aprender unos de otros y cómo los pequeños gestos pueden marcar la diferencia, por supuesto, también en la carretera.