El próximo mes de septiembre la gama Qashqai acogerá a un nuevo y peculiar miembro. Se trata de su nueva versión e-Power, capaz de ofrecer una conducción 100% eléctrica sin necesidad de contar o pasar por un punto de recarga para nutrir a su batería. La marca japonesa ya admite pedidos en su red de concesionarios, pudiéndose adquirir desde 39.850 euros sin incluir descuentos, precio que se corresponde a la variante con el nivel de acabado N-Connecta. En peldaños superiores, el acabado Tekna luce una tarifa de 42.450 euros y el Tekna+, el más completo y mejor dotado de su gama, de 45.200 euros.
El Qashqai e-Power ha sido desarrollado específicamente para Europa y según los responsables de Nissan es una solución idónea para aquellos que quieren conducir un vehículo eléctrico pero sin tener que preocuparse por encontrar un enchufe para recargar su batería, ni luchar contra su autonomía. Todo esto ya no es necesario. Entonces surge la pregunta del millón: si es un coche que funciona en modo 100% eléctrico, ¿por qué no es necesario enchufarlo?
La respuesta es muy sencilla, y no es una solución que se utiliza por primera vez. La energía eléctrica que hace funcionar el motor eléctrico la genera un propulsor de gasolina turboalimentado de compresión variable, con un funcionamiento muy silencioso. Esa energía se almacena en una batería de 2,1 kWh de capacidad y le llega al motor a través de un inversor. En el caso de que sea necesaria en momentos puntuales una mayor demanda de electricidad, la energía que genera el motor de combustión llega directamente al eléctrico sin necesidad de pasar por el inversor. Una solución de electrificación que le otorga el distintivo ECO de la DGT.
El motor de gasolina de este Qashqai tan especial tiene un bloque de tres cilindros, una capacidad de 1.5 litros y 154 caballos de potencia. Su consumo medio homologado es de 5,3 l/100 km y sus emisiones de CO2 de 120 g/km. Entre sus curiosidades hay que destacar que cuenta con el sistema e-Pedal, utilizado en modelos como el Leaf, que al activarlo permite conducir el coche utilizando solo el pedal de acelerador. Al levantarlo se produce una retención superior y el coche por sí solo puede llegar a detenerse por completo. Además de permitir recuperar energía, este sistema permite que el coche resulte muy cómodo cuando se utiliza en ciudad.