La sexta generación de Opel Astra ya está aquí. Con más de 30 años a sus espaldas, la marca alemana abre un nuevo capítulo y, por primera vez, este modelo estará disponible en versión híbrida enchufable, con dos niveles de potencia, así como con motores gasolina y diésel de elevada eficiencia. Sus potencias oscilan entre 110 CV y 130 CV, en las versiones gasolina y diésel, y hasta 165 kW (225 CV) en las variantes híbridas enchufables.
Los motores de combustión se ofrecen de serie con una caja de cambios manual de seis velocidades, mientras que el cambio automático de ocho relaciones (electrificado en los híbridos enchufables) está disponible como opción en los motores más potentes.
El plazo para pedidos se abrirá en otoño y las primeras unidades llegarán a los concesionarios a principios del próximo año.
5 puertas y Sports Tourer
Con carrocería de 5 puertas y familiar (Sports Tourer), el compacto mide 4.374 mm de longitud, 4 mm más que el de anterior generación, y 1.860 mm de anchura. Su distancia entre ejes crece 13 mm y alcanza los 2.675 mm. El maletero, con piso móvil, ofrece 422 litros de capacidad.
Desarrollado sobre la plataforma multienergía EMP2 del Grupo Stellantis, igual que el Peugeot 308 o el Citroën C4, entre otros, pero calibrada con el ADN de Opel, promete un comportamiento fiable y dinámico, cumpliendo así las aptitudes y capacidades a alta velocidad que se marcaron como objetivo principal durante su desarrollo.
Con suspensión delantera McPherson y trasera de eje de torsión, la rigidez torsional del chasis, que aumenta un 14% respecto a su predecesor, y la dirección han sido diseñadas para conseguir un alto control de la guiñada, mientras que en cuestión de frenos, Opel asegura gran potencia y estabilidad, tanto en curva como en línea recta.
Dinámico y musculoso
En su diseño dinámico y musculoso destaca el frontal Opel Vizor, estrenado en el Mokka, que integra tecnologías como los ultrafinos faros LED con iluminación Intelli-Lux Pixel LED y la cámara frontal del sistema Intelli-Vision. Si el nuevo frontal hace que el Astra parezca más ancho, su silueta irradia un aspecto muy dinámico, gracias a la pronunciada inclinación hacia delante del pilar C, mientras que la zaga repite lenguaje de diseño, con el Blitz (logotipo de la marca) situado en el centro, entre los pilotos traseros (de LED de bajo consumo) y la luz de frenos alineada verticalmente. El Blitz también funciona como cierre del portón trasero, que está fabricado con material compuesto de última generación, ligero, rígido y que permite esculpir de manera más precisa de detalles de diseño como los finos pilotos traseros.
Instrumentación digital
Diseñado y desarrollado en Rüsselsheim, donde empezará la producción este otoño, su interior presenta un puesto de conducción totalmente digitalizado Pure Panel (con acristalamiento completo en opción), con modernos y limpios gráficos (sin submenús), que integra en un formato horizontal dos pantallas de 10 pulgadas como si se tratase de una sola. Gracias a una capa especial que evita los reflejos prescinde de cubierta sobre las pantallas, mejorando su funcionalidad y aspecto tecnológico.
También los pasajeros pueden interactuar a través de las extra-anchas pantallas táctiles, como si se tratase de un smartphone. Igualmente, prescinde de cables, ya que la nueva generación de sistemas de infoentretenimiento multimedia de serie permite su conexión a Apple CarPlay y Android Auto de forma inalámbrica. Aun así, los ajustes más importantes, como el control de la climatización, siguen manejándose a través de interruptores y botones físicos.
Confort y equipamiento
Por lo que respecta al confort, el Astra incorpora unos ergonómicos y cómodos asientos delanteros de desarrollo propio, que cuentan con certificación AGR (Aktion Gesunder Rücken e.V. “Campaña para unas espaldas más saludables”) y son 120 mm más bajos que en el modelo anterior, lo que potencia la sensación de deportividad. En combinación con la tapicería en cuero Nappa ofrecen incluso ventilación, masaje para el conductor y calefacción tanto en la parte trasera como en la delantera.
En materia de equipamiento, la nueva generación estrena iluminación matricial IntelliLux Pixel LED de 168 diodos (84 en cada uno de los faros), completamente adaptativa, tecnología de vanguardia presente en Grandland e Insignia. Las luces largas se ajustan en milisegundos, sin deslumbrar al resto de usuarios de la vía al recortar con precisión el tráfico que se aproxima o precede. El alcance y la dirección de la iluminación varían en función de la situación de conducción y el entorno.
También se incluyen los últimos sistemas de asistencia a la conducción, desde el Head-up Display proyectado en el parabrisas hasta el sistema semiautónomo de asistencia Intelli-Drive 2.0 y cámara Intelli-Vision de 360 grados. Para ello, cuenta además de con una cámara multifunción en el parabrisas, con otras cuatro en la carrocería (delante, detrás y laterales), cinco sensores de radar (delante y uno en cada esquina) y de ultrasonidos en el frontal y en la zona trasera.
Las cámaras y sensores están integrados con la conectividad e-horizon en el sistema Intelli-Drive 2.0, que amplía el alcance de las cámaras y el radar y permite adaptar la velocidad en curvas, hacer recomendaciones de velocidad y realizar cambios de carril semiautomáticos. El sistema se completa con alerta de tráfico trasero cruzado, advertencia de largo alcance de los puntos ciegos y posicionamiento activo en el carril, que mantiene el coche en el centro del carril de circulación. Además, la detección de manos sobre el volante garantiza que el conductor siga participando en todo momento. También incluye control de crucero adaptativo, con función Stop&Go (reanudación automática de la marca) si se opta por el cambio automático.