Lexus pondrá a la venta el próximo mes de octubre un modelo muy especial y único en el mercado. Se trata del LM, iniciales de “Luxury Mover”, un monovolumen de grandes dimensiones -5,13 metros de largo y una anchura y altura de 1,89 y 1,94 metros, respectivamente, junto a una distancia entre ejes de tres metros- que se desmarca por completo del concepto y de la idea que tenemos de un coche de este tipo dado que el confort y la comodidad que brinda a sus pasajeros está a unos niveles superlativos, desconocidos en cualquier vehículo que se pueda adquirir hoy en día en nuestro país.
Por supuesto, el precio es acorde a lo que ofrece. El LM se puede adquirir por 125.000 euros si se trata de la configuración de seis plazas, o bien por 150.000 si apuntamos a la de cuatro asientos. A España está previsto que lleguen tan solo 100 unidades de este exclusivo automóvil.
Se alza sobre la plataforma GA-K, la misma que se emplea en los Lexus RX y ES y en algunos modelos de Toyota, y se reviste con una estética muy personal, si bien la carrocería mantiene esas líneas rectas y cúbicas propias de los grandes monovolúmenes. En el frontal llama poderosamente la atención una rejilla de gran tamaño muy vertical, pero lo verdaderamente sorprendente está en su interior, especialmente en el espacio reservado a los pasajeros de la segunda y tercera fila.
Desde las plazas delanteras se aprecia con claridad que la calidad de este modelo es realmente elevada, dentro de un diseño minimalista. Destaca la gran pantalla de 14 pulgadas del sistema multimedia, complementada por un equipo de audio Mark Levinson 3D que con 21 o 23 altavoces, según la versión, brinda un sonido envolvente y una reproducción del máximo nivel. Diche pantalla, al igual que otros componentes como el climatizador, las cortinillas de las ventanas, los reglajes de los asientos o la iluminación ambiente del habitáculo se manejan desde el sistema Lexus MultiOperating Panels por medio de unos mandos similares a los de un smartphone. El cuadro de instrumentos es también digital, quedando conformado por una pantalla de 12,3 pulgadas.
A la parte trasera se accede a través de dos grandes puertas correderas con accionamiento eléctrico, aunque curiosamente y a diferencia de otros monovolúmenes o vehículos de este tipo, sin guías a la vista en la carrocería. Una vez en su interior, la sensación es la de estar en el hall de un hotel de lujo y sentados en unos asientos propios de la gran clase de un Boeing 747, butacas en las que se puede inclinar el respaldo, desplazar de forma longitudinal, sacar un reposapiés y disfrutar de climatización y distintos niveles de masaje.
La versión de seis plazas, que ocasionalmente puede ser de siete pasajeros al contar con un reposacabezas oculto y cinturón de seguridad en el centro de la tercera fila, está ideada para el transporte de viajeros bajo los estándares más altos de exclusividad y comodidad. Es un coche pensado principalmente para empresas, traslados VIP o servicios de hoteles, entre otras alternativas. Si fuera necesario, estos asientos de la última línea se pueden plegar para aumentar la capacidad de carga del maletero, que ya de por sí es bastante generosa: 752 litros con las seis butacas activas y hasta 1.190 si se prescinden de las últimas.
El máximo lujo, en cuatro asientos
Sin embargo, el lujo extremo lo encontramos en la versión con cuatro asientos, para cuyo desarrollo se ha contado con la colaboración de empresas fabricantes de aviones, añadiendo un nivel extra de confort. Sentarse en los traseros es como viajar en un jet privado: se pueden inclinar hasta 76 grados y hacer de esa zona una oficina gracias a las mesas supletorias y conexiones de diferente tipo para aparatos electrónicos. Tras los asientos delanteros encontraremos una mampara, con cristal transparente o totalmente opaco, que puede subirse o bajarse para crear dos ambientes totalmente distintos y aislados.
Otro detalle que diferencia a esta variante de cuatro plazas de cualquier vehículo de este tipo es su enorme pantalla de 48 pulgadas frente a los pasajeros, de alta definición y con tres modos de visualización: pantalla completa, modo panorámico y dividida en dos, este último para que cada pasajero pueda ver su contenido favorito o diferentes reproducciones a la vez. Y bajo ella, los ocupantes podrán acceder a una nevera. Por lo que respecta al maletero, su capacidad es similar a la de la versión de seis asientos.
En lo que a seguridad activa y pasiva se refiere, el LM comparte los sistemas más avanzados incluidos por Lexus en sus modelos más recientes, como es el caso de Lexus Safety System+, que aglutina diferentes sistemas de ayuda a la conducción apoyados por diferentes sensores y cámaras, buscando minimizar al máximo los riesgos de accidente y también ayudar a reducir la fatiga y mantener el estado de alerta del conductor. Sistemas que tendremos siempre al día gracias a la descarga, de manera inalámbrica, de actualizaciones de software, evitando la necesidad de acudir a un taller de la marca. Opcionalmente, su dotación se puede mejorar con un sistema de seguridad avanzado que permite la conducción autónoma.
Híbrido conocido
Lexus ha elegido para el LM un sistema de propulsión híbrido autorrecargable, el conocido 350h de otros modelos de la marca como el NX o el RX. Está dotado con un motor de gasolina de 2.5 litros de 250 CV de potencia y 239 Nm de par y goza de tracción total gracias a la presencia de un electromotor en el eje trasero. En su luna delantera luce la etiqueta ECO de la DGT y en su ficha técnica unos consumos digamos que ajustados, con un gasto medio homologado de 7,3 l/100 km que no está nada mal para un coche de este tamaño y 2.400 kg de peso, lo que tampoco le impide conseguir una satisfactoria aceleración de 0 a 100 km/h de 7,8 segundos.
Como detalle técnico hay que fijarse en la suspensión. Por motivos de espacio se ha desestimado la de tipo neumático a favor de la más convencional de muelles, pero con amortiguadores de dureza variable con ajuste electrónico, que se adaptan al tipo de conducción que se realice en cada momento para favorecer la estabilidad y el confort. También varía su firmeza en función del modo de conducción que se elija: Eco, Normal y Sport.