Al igual que Afcar Europa, las 16 asociaciones españolas reunidas en Afcar España se muestran a favor de considerar al usuario/consumidor como propietario de sus datos generados, incluida la asignación del uso a sus proveedores, lo que implica la libre elección de servicios posventa cuando su vehículo lo necesite. En este sentido, han enviado a la Unión Europea su opinión sobre el proyecto de la Ley de Datos, hecho público el pasado febrero, con el objetivo de regular el uso de datos generados en la UE en todos los sectores económicos y su acceso a ellos.
El documento apoya el principio de la soberanía de los datos de los usuarios de productos conectados, incluido su derecho a asignar el acceso a los datos generados por el uso de sus productos a los proveedores de servicios de terceros que elijan. Esto afecta directamente al mantenimiento y reparación de vehículos y a todos los servicios relacionados con dicha actividad, gestionados en su mayoría por pymes y micropymes, que quieren que se garantice su derecho a seguir trabajando en un mercado de libre competencia y evitar que grandes operadores, como multinacionales tecnológicas o los propios fabricantes de vehículos, puedan aprovecharse de posiciones de dominio en el mercado.
Garantía de equidad
Según la Comisión Europea, el objetivo de la Ley de Datos es garantizar la equidad en el entorno digital, estimular un mercado de datos competitivos, brindar oportunidades a las empresas y conseguir que los datos sean más accesibles para todos, evitando su control por grandes operadores. Esto dará lugar a nuevos e innovadores servicios y a precios más competitivos para la posventa y la reparación de objetos conectados, entre ellos los automóviles.
Afcar Europa y Afcar España consideran que la complejidad del sector del automóvil exige una normativa propia que apoye y complemente la aplicación de los principios consagrados en la norma europea; es decir, medidas concretas, jurídicas y técnicas, tales como el acceso a las funciones del vehículo o la interfaz hombre-máquina. La actual propuesta deja demasiado margen de interpretación en cuestiones técnicas de gran calado, lo que genera inseguridad jurídica y un alto riesgo de litigio, argumentan ambas entidades.
Afcar España entiende que su posición defiende a toda la posventa, incluidas las empresas ligadas a fabricantes de vehículos, pues apuesta por la continuidad de los servicios multimarca que prestan a sus clientes, por ejemplo, en áreas como el vehículo de ocasión o en carrocería.