Arval ha deparado unos sólidos resultados a pesar de la gradual normalización de los precios de sus vehículos usados. Esta es la conclusión o el resumen que hace la operadora francesa de renting y movilidad de un primer semestre del año que ha saldado, no obstante, con un descenso de su beneficio neto del 10,6% hasta los 688,8 millones de euros.
Lo que podría parecer un resultado desalentador se encaja con naturalidad en la compañía de BNP Paribas. Porque se achaca a circunstancias del mercado que afectan a todas las empresas flotistas: como apuntábamos al principio, la normalización de los precios de los vehículos que finalizan sus contratos de renting tras dos años de registros disparados.
Más ventas, pero menos beneficios
Las ganancias procedentes de la comercialización de estos automóviles se cifran en 572,4 millones de euros, lo que supone una contracción del 27,5% respecto a lo obtenido en el mismo período del año anterior… y eso que se ha producido, asegura la compañía en un comunicado, «un significativo incremento en el número de vehículos vendidos».
Excluyendo los resultados por la venta de usados, el resultado bruto operativo de Arval entre enero y junio reflejaría un incremento del 14,2%, hasta los 873,2 millones de euros; sin embargo, en el total de las cuentas se anota un negativo del 6,9% y 1.445,6 millones de euros. En términos netos, el resultado operativo se cuantifica en 906,7 millones de euros, «mostrando una buena resiliencia», apunta la empresa, a pesar de significar un retroceso del 12,7% respecto al primer semestre de 2023.
Esa resiliencia apunta a las otras áreas del negocio. Y es que los márgenes por los contratos de renting se elevaron un 8,5% hasta 405,2 millones de euros, mientras que los márgenes por servicios repuntaban nada menos que un 19,8%, alcanzando los 468,1 millones en comparación con los seis primeros meses del año pasado.
Crece la flota impulsada por los electrificados
La flota financiada también ha evolucionado favorablemente a los intereses de Arval. A cierre de junio totalizaba 1,74 millones de vehículos, un 6,4% por encima del registro logrado doce meses atrás. De ellos, 1,16 millones se encuadran en el segmento corporate, que crece en este período un 6,3%, mientras que el segmento retail alcanza las 532.827 unidades tras un alza del 9,5%. En sentido contrario, la flota de suscripción a medio plazo de Arval Flex se veía reducida un 17,1% hasta 51.697 vehículos, a consecuencia, explica la operadora, de la «mejorada disponibilidad de vehículos para renting de larga duración gracias al retorno gradual a los niveles normales de tiempos de entrega».
La empresa subraya en este sentido que su flota incluye un total de 508.949 vehículos electrificados (entre eléctricos puros e híbridos enchufables), un 38,9% más que en la primera mitad de 2023, con un notable incremento de los cien por cien eléctricos, que tras una mejora del 64,7% alcanzan las 206.899 unidades en la flota de Arval.