Ford ha dado a conocer la nueva gama Tourneo Connect, una furgoneta compacta que se presenta como un vehículo muy práctico, funcional y sobre todo versátil y con muchas posibilidades de uso. Con el objetivo de abaratar costes de producción al máximo, para esta nueva generación Ford ha ido de la mano con Volkswagen, con lo que podríamos decir que este nuevo Tourneo Connect es un clon del nuevo Caddy, modelo con el que comparte desde la plataforma hasta su gama de motores, así como otros muchos componentes mecánicos, como es el caso de los relacionados con el chasis.
Con este nuevo Tourneo Connect, que comenzará su comercialización a principios de 2022, la americana propone una opción capaz de satisfacer las necesidades de un variado perfil de usuarios, desde los que necesitan un vehículo para un uso profesional con versiones ideadas para el transporte, hasta variantes pensadas para un uso privado y que muy poco o nada tienen que envidiar a un SUV o a un monovolumen compacto. Tanto para un tipo de uso como para otro, la gama se articula sobre dos tallas de carrocería, L1 con la batalla más corta y con una longitud total de 4,50 metros, y L2, con la batalla más larga y 4,85 metros de largo, con la particularidad de que en ambos tamaños se puede disponer de hasta siete plazas.
Además, para facilitar al máximo su uso y practicidad el habitáculo del Tourneo Connect ofrece una sensacional modularidad. Se pueden abatir o retirar por completo los asientos de la segunda y tercera fila, lo que permite adaptar el espacio del interior a las necesidades de uso de cada momento, pudiendo transportar objetos voluminosos y largos sin ningún tipo de problema. Las versiones con la carrocería L1 brindan un volumen de carga de 2,6 m3, que aumenta hasta los 3,1 m3 en las variantes con la carrocería L2, con las facilidades de acceso que procuran sus dos grandes puertas correderas laterales.
Con personalidad propia
Si bien como hemos dicho este nuevo Tourneo Connect es un clon del Caddy, la marca del óvalo lo ha dotado de personalidad propia y muestra una imagen muy diferente a la de su “hermano” alemán, sobre todo en el frontal, que adopta el nuevo lenguaje de diseño de Ford que lo acerca a la estética de los modelos más novedosos de la marca. En el interior también se deja notar su procedencia Volkswagen, pero aquí también Ford ha puesto de su parte para diferenciarlo y otorgarle una imagen también más personal.
Ford ha cuidado mucho su acabado y todos sus detalles, recurriendo para ello a materiales de buena factura que elevan la sensación de calidad percibida. Tampoco se han escatimado esfuerzos para que sea un vehículo confortable y agradable. Y en cuanto a su propuesta comercial, se ofrece con cuatro niveles de acabado: Trend, Active, Titanium y Sport, disponiendo de una buena dotación de serie todos ellos, siendo especialmente destacable su generoso equipamiento tecnológico.
Respecto a este último punto, el Tourneo Connect se ha puesto al día. A simple vista (en las versiones mejor dotadas) destacan las pantallas digitales que conforman el cuadro de instrumentos de 10,25 pulgadas y la del centro del salpicadero, que puede ser de hasta 10 pulgadas. Esta última integra un buen número de funciones del coche, entre las que se encuentran el sistema multimedia y de conectividad, en este caso el denominado SYNC 3.
Las versiones equipadas con la pantalla de 10 pulgadas cuentan con el módem FordPass Connect, que permite estar conectados mientras se conduce y tener información online del navegador con actualizaciones de mapas, rutas alternativas o informes de tráfico, entre otras. También presume de tener un equipamiento muy generoso de sistemas electrónicos de ayuda a la conducción y de seguridad. Ofrece hasta 19 tecnologías de asistencia al conductor, entre las que se incluyen un asistente al aparcamiento muy completo y evolucionado.
Motores de combustión tradicional
La gama de esta nueva generación cuenta por el momento con un motor de gasolina EcoBoost de 1.5 litros de cilindrada de 114 CV y 220 Nm de par y dos motores diésel EcoBlue de 2.0 litros con potencias de 102 y 122 CV. Todos ellos disponen de serie de una caja de cambios manual de seis velocidades, aunque también es posible, en el caso del motor de gasolina y el diésel más potente, acceder a la caja de cambios automática de doble embrague PowerShift de siete relaciones. Además, el diésel de 122 CV puede contar con un sistema de tracción a las cuatro ruedas, aumentando notablemente las posibilidades de uso de este vehículo.