Francia ha redefinido sus planes de ayuda para acceder a un vehículo eléctrico introduciendo importantes cambios. Entre ellos, el tan comentado leasing social que facilita el acceso a un vehículo eléctrico desde apenas 49 euros al mes, sin entrada, y no renuncia a que, además, el precio pueda ser incluso inferior a corto y medio plazo.
Emmanuel Macron ha cumplido con su promesa electoral. Durante la campaña prometió activar un renting social que facilitara la incorporación de todos a la nueva movilidad eléctrica por menos de 100 euros al mes y desde primeros de este mes de enero los franceses ya tienen un plan que les permite disponer de un vehículo eléctrico para desplazarse por menos de esa cantidad.
Dotado de algunas limitaciones, el renting social ofrece un precio genérico para todos los ciudadanos, aunque únicamente está disponible para vehículos que cumplan con una serie de condiciones.
Un baremo medioambiental decide el precio
Así, los coches que se pueden adquirir mediante este leasing social deben de cumplir los requisitos que se han fijado en la puntuación medioambiental (https://www.legifrance.gouv.fr/jorf/id/JORFTEXT000048088891)) establecida por el Gobierno francés para valorar qué modelos son susceptibles de ser subvencionados y cuales no lo son. Una serie de exigencias que, curiosamente, dejan fuera de toda posibilidad a los vehículos eléctricos chinos y a cuantos allí están fabricados, independientemente de la marca.
Además, el plan también establece un precio máximo para el coche (47.000 euros) y un peso máximo (igual o inferior a 2.400 kg) como límites inquebrantables para poder recibir la subvención.
Subvenciones diferentes según el modelo
Las subvenciones a recibir no son iguales para todos los modelos, pues una vez cumplidos estos requisitos cada modelo que sí puede ser subvencionable cuenta con una cuota de leasing específica que varía en función de su precio.
Y, a partir de ahí, el plan gubernamental también establece una serie de condiciones para los ciudadanos franceses que pueden acogerse a estas ayudas. De esta manera, sobre las cuotas fijadas en el documento anterior el plan aporta rebajas adicionales a quienes cumplan con los siguientes requisitos:
El coche, herramienta de trabajo
De entrada, el conductor habitual del vehículo debe vivir a más de 15 kilómetros de distancia de su lugar de trabajo. También debe de realizar más de 8.000 kilómetros al año como consecuencia de su actividad profesional, dado que para ser objeto de la subvención o ayuda se considera al vehículo tanto una herramienta de trabajo o un medio de locomoción con el que realizar los desplazamientos in itinere que requiere la actividad laboral.
Igualmente, los conductores deben declarar al menos disponer de un ingreso fiscal inferior a los 15.400 euros. Esta cifra no es ni la cantidad bruta ni la neta que ingresa anualmente el beneficiario del plan, dado que para su cálculo se aplican una serie de bonificaciones y deducciones a los ingresos recibidos durante el año y que se declaran en el equivalente al IRPF francés.
Para un cálculo rápido de los mismos, el estado francés ha creado una web (https://www.ecologie.gouv.fr/mon-leasing-electrique) en la que los interesados pueden comprobar rápidamente si estarían o no dentro de los límites que marca la norma. Caso de quedar amparado por la misma, entonces la cuota de leasing a pagar puede resultar incluso aún más reducida.
Compromisos de beneficiario
Finalmente, también hay una serie de condiciones que los beneficiarios del plan tienen que cumplir por contrato para poder acceder al leasing social. Así, todas las personas que adquieran un vehículo bajo esta modalidad se comprometen a abonar las cuotas establecidas (que serán siempre por la cantidad fija resultante de los cálculos antes mencionados) durante un mínimo de tres años. Dicha cuota les habilita para poder circular con los vehículos durante un mínimo de 8.000 km y un máximo de 12.000 sin por ello tener que abonar ningún tipo de sobrecoste financiero.
Por último, además del seguro convencional incluido en la operación para cubrir posibles daños en el vehículo y sus ocupantes, los beneficiarios también deben suscribir un seguro de rescisión del contrato por posible causas como fallecimiento, invalidez o pérdida del empleo de la persona accede al renting social.
Superados todos estos trámites, los beneficiarios pueden acceder a modelos como un Citroën ë-C3 por 54 €/mes, a un Fiat 500e por 89 €/mes, a un Opel Corsa eléctrico por 94 €/mes o a un Peugeot e-208 por 99 €/mes; y hay muchos más en la lista de posibilidades, pero ya superan los 100 euros al mes de cuota. Y todo apunta a que el futuro Renault Twingo que llegará este mismo año se podrá adquirir por una cuota de apenas 40 €/mes.
Contratación directa en los concesionarios
La contratación del renting social se efectúa directamente en los concesionarios de las marcas. Que el plan es un éxito lo muestra, por ejemplo, el grupo Stellantis, que con 14 marcas en su portfolio puede aportar hasta nueve modelos eléctricos al plan de los 14 que actualmente ofrece en Francia, y pronto dispondrá de muchos más de sus distintas marcas que poder ofrecer.
Según un reciente comunicado, el fabricante ya ha registrado más de 20.000 pedidos en firme de este renting social, cuyas primeras entregas comenzarán a producirse durante esta próxima semana.
Stellantis también afirma haber establecido alrededor de 100.000 contactos de clientes potenciales que se pusieron al habla con sus distintas marcas desde el pasado 14 de diciembre, día en el que las condiciones del plan se dieron a conocer. Clientes con los que ahora el fabricante está nuevamente entrando en contacto para ofrecerles la adquisición de los vehículos.
Superadas todas las expectativas
De igual modo, las concesiones de sus marcas vieron superadas todas sus expectativas en las recientes jornadas de puertas abiertas que han venido celebrando durante el presente mes de enero por parte de los ciudadanos interesados en acceder a un vehículo mediante el programa de leasing social.
Las 20.000 solicitudes ya cursadas y validadas por el grupo Stellantis suponen ya más del 80% de los volúmenes previstos por el plan… y únicamente han pasado 19 días desde que este comenzó su andadura. El plan se dio a conocer el pasado 14 de diciembre y entró en vigor el 1 de enero de este año.