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viernes, septiembre 13, 2024

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Elegir las gasolineras más baratas puede suponer un ahorro de 250 euros al año

Un estudio realizado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) sobre los precios en las gasolineras de toda España concluye que es posible ahorrar hasta 250 euros anuales eligiendo las gasolineras más baratas, si bien la tarea es harto difícil ya que solo una de cada seis gasolineras tiene precios baratos.

El estudio, que se publica en el número de julio-agosto de la revista OCU-Compra Maestra, señala que las diferencias de precios entre las diferentes cadenas son notables y reconoce como más baratas las de Bonarea, GM Oil, Gas Expres, Petroprix y Lecrerc, mientras que identifica como más caras las de Cepsa, Repsol, BP e IDS; es decir, que las cadenas con mayor red a nivel nacional son las que tienen los precios más elevados, con diferencias mínimas, además.

Las cadenas más baratas son las que pertenecen a redes de distribución, que buscan mediante precios bajos atraer clientes a sus establecimientos. También figuran entre las más económicas las cadenas de bajo coste, con un modelo de autoservicio o directamente automáticas.

Para la elaboración del estudio, la organización de consumidores ha analizado los precios de más de 10.000 gasolineras de toda España entre los meses de febrero y mayo. Con estos datos, ha calculado una clasificación de precios medios de cada gasolinera en el periodo para cada tipo de combustible, lo que permite elaborar un índice para facilitar a los consumidores la comparación de precios entre las distintas gasolineras de cada cadena.

Diferencias de precios

De «notable» califica el estudio la diferencia de precios entre las cadenas con los carburantes más caros y más baratos. Concretamente, la media en el diésel, combustible más utilizado en nuestro país, es de 21,5 céntimos por litro entre Bonnarea, la más barata, e IDS, la más cara.

La diferencia tampoco es muy inferior cuando se trata de gasolina 95, que se establece en 20,2 céntimos por litros. Para un vehículo con un uso y consumo estándar, esta diferencia se eleva a 250 euros anuales para ambos combustibles, por el menor consumo del diésel y el mayor precio de la gasolina.

El análisis de la OCU permite conocer cuáles son las provincias con los precios más elevados; a saber, Baleares, Madrid y Guipúzcoa, mientras que las más baratas son las que se encuentran en zonas agrarias o están atravesadas por grandes vías de comunicación, como Almería, Lérida, Murcia, Valencia, Teruel, Zaragoza, Huesca, Soria y Navarra.

Localización difícil

Para los consumidores resulta difícil localizar las gasolineras baratas, puesto que solo una de cada seis tiene unos niveles de precios bajos. En algunas ciudades pequeñas como Pontevedra, Huelva, Teruel, Orense y Oviedo las diferencias son mínimas. En Gran Canaria, Valencia y Madrid, el porcentaje de gasolineras con precios bajos es el menor y resulta más difícil encontrarlas. En este sentido, si se quiere ahorrar, OCU aconseja utilizar aplicaciones que permitan comparar precios y localizar las estaciones de servicio más baratas, y pone a disposición de los usuarios su propio comparador.

Por otra parte, la organización de consumidores advierte sobre la importante concentración del mercado de distribución de carburantes español, al que califica de oligopolio y del que asegura que está dominado por las tres grandes empresas con precios más altos.

La falta de competencia permite situaciones como la ocurrida en la pandemia, en la que las gasolineras no trasladaban la acusada bajada del precio del petróleo durante el confinamiento y, por el contrario, desde noviembre lo hacen a gran velocidad, lo que que va a provocar un sobrecoste anual de 250 euros en el caso del diésel y de 300 euros en de las gasolinas. Para evitar estos incrementos de precios, OCU recomienda elegir y repostar siempre en las gasolineras más baratas.

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