Se puede dar por hecha la recuperación total del negocio del alquiler de vehículos en nuestro país tras la debacle provocada por la pandemia en 2020, con especial incidencia en aquellos sectores vinculados al turismo. Ya estuvo cerca en 2022, hablando en términos de facturación, y este año no solo se van a alcanzar los niveles récord de 2019, sino que se van a superar.
Así lo contempla al menos el Observatorio Sectorial DBK de Informa (filial de Cesce), empresa de suministro de información comercial, financiera, sectorial y de marketing en España y Portugal, que estima que los ingresos de las empresas del rent a car se situarán al término de este ejercicio en unos 1.900 millones de euros, lo que vendría a suponer un incremento del 7,6% respecto a los 1.765 millones en los que ha sido cifrada la actividad del sector en 2022, un 36,8% más que el año anterior.
Registros más que meritorios teniendo en cuenta que la escasez de componentes electrónicos para la fabricación de automóviles limitó notablemente las posibilidades de acceso de estas compañías a nuevas unidades, lo que se refleja en la caída del 35,1% de las matriculaciones de este canal a lo largo del último año, pudiendo adquirir menos de 100.000 vehículos (98.888).
Extranjeros y nacionales
El alquiler de vehículos en España se ha visto impulsado, asegura Informa, por un ascenso de la actividad turística que ha favorecido un nuevo crecimiento de la demanda, unido a la subida de los precios. Y por lo que respecta a 2023, las expectativas de demanda para la campaña veraniega son «favorables», por lo que se estima que a corto plazo tendrá continuidad la tendencia ascendente de la demanda de vehículos, tanto por parte de los españoles como de los turistas extranjeros.
El año pasado fueron los turistas procedentes de otros países los que mostraron un mayor dinamismo en el alquiler de automóviles, con un incremento de su gasto del 56% hasta los 750 millones de euros. El cliente nacional, por su parte, se mostró más moderado tanto en términos porcentuales como absolutos, con un repunte del 33% para un total de 420 millones de euros. El segmento que experimentó el menor alza, «afectado por la creciente tendencia hacia la utilización de medios digitales en las comunicaciones y reuniones de empresa», apunta el Observatorio, fue el de empresas/negocios, que mejoró sus datos de facturación un 20% para situar su valor en 595 millones de euros.
Las grandes, cada vez más fuertes
El Observatorio Sectorial DBK viene también a llamar la atención sobre la consolidación de las grandes compañías en los primeros puestos de este mercado durante los últimos años, en un país como el nuestro con una presencia mayoritaria de pequeñas y medianas empresas que operan en un ámbito local o regional. Concretamente, el 93% de las alquiladoras son firmas con menos de diez empleados, frente al 1,3% que representan aquellas que cuentan con 100 o más trabajadores.
Según la consultora, en base a los datos del Directorio Central de Empresas del Instituto Nacional de Estadística (INE), en enero de 2022 operaban 2.174 empresas de alquiler de todo tipo de vehículos (automóviles, vehículos ligeros y camiones). No obstante, entre las cinco primeras acapararon una cuota de mercado del 51% en 2022, porcentaje que se eleva hasta el 76% al considerar a las diez más importantes.
