El operador logístico Dascher continúa adelante con su proyecto “City Distribution” de entregas sin emisiones de última milla que ha implementado en diferentes ciudades del continente europeo. Como parte de él, acaba de anunciar la expansión de su flota de distribución local con la incorporación de una nueva bicicleta eléctrica en San Sebastián. No se trata de una gran operación, pero sí refleja el compromiso de la compañía con las opciones de distribución sostenibles.
Dascher comenzó a probar las entregas con bicicletas eléctricas de 250 w en el centro de la ciudad española a mediados de 2019. El período de prueba resultó un éxito y ya son más de cuatro años realizando entregas en locales y comercios ubicados en su centro urbano. Este método realiza entre 20 y 25 entregas cada día, y su distancia promedio está entre 2,5 y tres kilómetros para completar sus envíos.
Reducción de la huella de carbono a cero
La cadena logística arranca con la salida de los camiones de la delegación de San Sebastián, a 12 kilómetros del centro, hacia un microhub. Desde allí, las mercancías del día se cargan en las bicicletas eléctricas y se reparten por su casco histórico con cero emisiones.
Estas bicicletas amarillas y azules están dotadas de una caja de dos metros de altura colocada en la parte trasera, lo que permite transportar hasta 200 kilos de mercancía. Este método no sólo es rápido y respetuoso con el medioambiente, sino que también permite sortear los obstáculos que ralentizan las entregas urbanas, como atascos o calles cortadas. Además, pueden acceder a zonas peatonales en las que otros tipos de vehículos, como camiones, no pueden. Este tipo de entregas permiten mejorar la calidad del aire y reducir el ruido en las calles, así como disminuir la congestión del tráfico.