En Berlín, coincidiendo con la carrera de la Fórmula E, especialidad en la que Cupra tiene una notable relevancia, se ha dado a conocer la versión definitiva del Tavascan, el segundo modelo cero emisiones de la marca española tras el Born pero el primero con carrocería SUV, que todo hay que decirlo, no difiere mucho del prototipo presentado en Fráncfort en 2019. El Tavascan ha sido diseñado y desarrollado en Barcelona con Jorge Díez al frente del equipo de diseño, si bien se fabrica en la planta del Grupo Volkswagen de Anhui, en China, y desde allí se exportará a los mercados más importantes del mundo con el objetivo de vender 50.000 unidades al año. En Europa comenzará su comercialización en 2024 y su precio se hará público cuando se acerque la fecha de su lanzamiento.
El nuevo modelo de Cupra se alza sobre la plataforma MEB específica para coches eléctricos del Grupo Volkswagen, la misma que se emplea en el Volkswagen ID.5 o el Skoda Enyaq, con los que comparte desde el sistema de transmisión hasta los componentes del chasis, aunque en este apartado Cupra da su toque personal. También las dimensiones exteriores, al anunciar una longitud de 4,64 metros, una anchura de 1,86 y una altura de 1,60, cotas a las que hay que añadir una distancia entre ejes de 2,77 metros.
Diseño diferencial
Si algo diferencia a las creaciones de Cupra es su diseño y en este caso el Tavascan no iba a ser menos. Así, muestra un aspecto muy personal, dinámico y emocional, con la línea del techo muy descendente sobre la zona trasera para otorgarle un toque coupé muy atractivo. El frontal, con una serie de detalles que definen el lenguaje de diseño de los futuros modelos de la marca, llama poderosamente la atención. Este es el caso de la original firma lumínica con tres triángulos de los faros delanteros, de tipo Matrix LED y con funciones avanzadas de iluminación activa; también del logotipo de la marca, iluminado, una solución muy poco vista en modelos de producción. Este recurso encuentra continuidad en la zaga, donde también apreciamos los grupos ópticos con tres triángulos luminosos y el logo iluminado, haciendo que esta parte del coche no pase desapercibida y sea reconocible al instante.
El interior también sorprende con un diseño muy personal, vanguardista y sobre todo original. El elemento sobre el que orbita todo es la consola central, que es como una columna vertebral que se une con el salpicadero y se prolonga hacia las puertas, un diseño que además de ser muy poco convencional, da una sensación de ligereza a todo el conjunto.
Los asientos, con un diseño muy deportivo, están tapizados con materiales sostenibles. Otro elemento que llama mucho la atención es la pantalla del centro del salpicadero, de tipo flotante y 15 pulgadas, la más grande montada hasta la fecha en un Cupra. Permite diferentes posibilidades de personalización y cuenta con la nueva interfaz hombre-máquina (HMI) para permitir un manejo fácil e intuitivo. Asimismo, el Tavascan es el primer modelo de la enseña española que está equipado con un equipo de sonido con 12 altavoces de origen Sennheiser.
Los responsables de la marca no han dado a conocer muchos detalles sobre el espacio interior de este SUV, aunque afirman que ha sido optimizado para poder ofrecer un elevado confort en todos sus asientos y que dispone de un buen número de huecos para dejar objetos de pequeño tamaño. El único dato que han comunicado ha sido la capacidad del maletero, que asciende a 540 litros, y que el portón es eléctrico y se puede abrir mediante el sistema de Pedal Virtual.
Dos opciones de propulsión
El Cupra Tavascan se puede elegir con dos sistemas de propulsión: uno denominado Endurance, que cuenta con un electromotor en el eje trasero de nueva generación de 286 CV (210 kW) y un par de 545 Nm; y el VZ, que equipa un motor en cada eje, por lo que dispone de tracción total. El electromotor del eje trasero es similar al del Endurance, de 286 CV, mientras que el del tren delantero tiene una potencia de 109 CV (80 kW), de modo que rubrica una potencia total combinada de 340 CV (250 kW) con la que es capaz de ofrecer unas prestaciones muy elevadas, como prueba su aceleración de 0 a 100 km/h en 5,6 segundos. En ambos casos se disponen de múltiples modos de conducción: Range, Comfort, Perfomance, CUPRA, Individual y Traction. El primero de ellos está ideado para obtener el menor consumo y con ello alargar la autonomía de la batería y el último sólo está disponible en la versión con tracción total.
La batería tiene una capacidad de 77 kWh en todos los casos, quedando ubicada bajo el suelo, entre los dos ejes, y con refrigeración líquida. Su autonomía se cifra en 550 km en el caso del Cupra Endurance, rango que se reduce a 520 km en el VZ. La batería permite una potencia máxima de recarga de 135 kW, de modo que en siete minutos puede tener energía para recorrer 100 km. También posibilita cargar del 10% al 80% de su capacidad en unos 30 minutos.
Para optimizar la autonomía cuenta con un sistema de frenada regenerativa que se activa por medio de las levas en el volante, con cuatro niveles diferentes. Por su parte, el sistema de climatización cuenta con una bomba de calor, que es especialmente eficiente con bajas temperaturas. Además, para mejorar la experiencia de conducción, la aplicación CUPRA Easy Charging informa de los puntos de recarga disponibles a lo largo de la ruta y facilita los procesos de carga.
Un punto más de dinamismo
Para brindar un comportamiento y un carácter más deportivo, Cupra se encarga de poner su sello personal en todo lo que tiene que ver con los ajustes de los distintos elementos del chasis, aportando al Tavascan un reparto de pesos muy cercano al 50% en cada eje (49:51), así como un centro de gravedad muy bajo. A ello suma una dirección muy progresiva y el control de chasis adaptativo DCC Sport, además del control de estabilidad ESC con una configuración deportiva (ESC Sport) y con la posibilidad de poder desconectarlo por completo (ESC OFF).
La puesta a punto del chasis se ve complementada por un buen número de sistemas de seguridad y de ayuda a la conducción, todos ellos muy evolucionados. Entre ellos hay que destacar al denominado Car2x, que habilita la comunicación entre coches para compartir información vial sobre vehículos de emergencia, averiados o accidentados para prevenir situaciones críticas con mayor anticipación. Este sistema, en principio, estará disponible en aquellos países que tengan la infraestructura necesaria para prestar estos servicios. Otro sistema digno de mención, visto hasta ahora en modelos de los segmentos más altos, es el que permite estacionar el coche de forma remota, desde fuera del vehículo y con el smartphone.