Ante el apogeo del mercado de segunda mano es importante realizar una minuciosa comprobación antes y después de la compra de un vehículo de ocasión, ya que por ley se debe ofrecer un año de garantía y es importante detectar aquellos problemas internos y no visibles que pueda tener el automóvil con el objetivo de no achacarlo a un posible deterioro por desgaste si se localiza pasado un tiempo. En este sentido, hay concesionarios y particulares que, incluso, entregan un certificado que avala la revisión del coche.
Para estar seguros de acertar con la compra, Norauto, cadena de mantenimiento y equipamiento integral del automóvil, hace una serie de recomendaciones, tales como conocer los datos técnicos o si el vehículo tiene cargas, la situación administrativa, la fecha de caducidad de la ITV, etcétera, para lo que basta con la matrícula o bastidor para saber, a través de la Dirección General de Tráfico, quién es el titular de un vehículo y su historial de ITV, kilometraje, potencia, combustible o masas máximas.
Igualmente, señala que hay determinados puntos que puede revisar el conductor, pero hay otros que es mejor que sean comprobados por un profesional, de forma que el cliente tenga la certeza de que el vehículo ha sido revisado y, en caso de detectar posibles averías, puedan ser demandadas al vendedor.
Entre las recomendaciones de Norauto figura verificar que el vehículo ha pasado la ITV y tiene toda la documentación en regla. Un vehículo debe llevar siempre el permiso de circulación y la tarjeta ITV o ficha técnica, acreditando así que está homologado para circular por las carreteras y que periódicamente ha superado las revisiones.
Respecto a los neumáticos, Paco Arjona, market manager de neumáticos de Norauto, aconseja comprobar que están en buen estado, que no tienen desgastes, cortes, bultos, que no pierden aire, etc, ya que «una pérdida anormal de presión puede deberse a un desinflado o a una fuga entre llanta y neumático, o la válvula puede estar defectuosa. Cambiar los neumáticos del vehículo supone un sobrecoste que hay que tener en cuenta a la hora de negociar el precio del automóvil».
En cuanto al sistema de frenado, hay que estar pendientes de si se escuchan golpes o vibraciones cuando se frena, lo que probablemente denote que los discos estén doblados. Si se escucha un ruido durante el frenado, las pastillas pueden estar desgastadas. Igualmente, si el pedal de freno tiene un tacto esponjoso, hay que cambiar el líquido de frenos.
Norauto recomienda cambiar las pastillas de freno cada 40.000 km o cuando su espesor esté por debajo del mínimo que indica el fabricante, y cada 80.000 km los discos de freno. «Cuando se vayan a cambiar los discos, se aconseja sustituir también las pastillas. Igualmente es recomendable revisar el estado de las manguetas y latiguillos (tuberías que permiten que el líquido de frenos circule en el sistema)», señala Víctor Pardo, market manager de taller y piezas.
Mantenimiento
El fabricante recomienda revisar el vehículo transcurrido un determinado tiempo y recorridos una cantidad de kilómetros. Haciendo esta revisión periódica se mantiene la garantía oficial, siempre que se sigan sus especificaciones. En este sentido, la compañía recuerda que pasar la revisión en sus talleres mantiene esta garantía del fabricante. Por ello, y teniendo en cuenta los gastos futuros, es importante revisar en qué estado se encuentra el vehículo en lo que respecta al mantenimiento. Por ejemplo, la correa de distribución se suele cambiar entre los 60.000 y los 240.000 kilómetros o entre los 5 y los 10 años, según la marca y el modelo, y suele suponer un coste extra que hay que tener en cuenta a la hora de negociar el precio de venta. En el caso de que el coche lleve cadena de distribución, esta operación no es necesaria.
En cuanto a la electrónica, la red de talleres señala que con una máquina de diagnosis profesional es posible detectar averías eléctricas que haya registrado el propio vehículo, como problemas con el airbag, el ESP o el ABS. También puede indicar kilometraje y fecha en la que ha surgido el fallo electrónico.
Igualmente, hay que comprobar que la climatización funciona correctamente, ya que el aire interior está cinco veces más contaminado que el exterior, de ahí la importancia de una buena calidad del aire. Se recomienda reemplazar el filtro del habitáculo cada año y realizar un mantenimiento de recarga de gas cada dos años.
¿Cuesta cambiar de marchas? Si es así, seguramente haya un problema de embrague. Es importante cambiarlo si dificulta el cambio de marcha o cuando patine (si la velocidad de motor aumenta más rápido que la velocidad del automóvil). Si hay un fallo, se recomienda cambiar el conjunto completo.
Batería, transmisión y amortiguadores
La batería, por su parte, tiene una vida útil de cuatro a cinco años y los talleres puede realizar un diagnóstico de la misma y del circuito de carga. Ante el menor signo de debilidad se debe cambiar. En el caso de los vehículos con start-stop, hay que conectar el equipo de diagnosis electrónica para realizar un chequeo y una reprogramación en caso necesario.
Esencial en el funcionamiento del coche es la caja de cambios, que es la encargada de transmitir el par del motor a las ruedas para que estas se muevan y el coche avance. «Los síntomas más evidentes de deterioro que pueden aparecer en las cajas manuales son el bloqueo, ruido o dificultad al intentar meter una marcha, la sensación de que la marcha patina o una aceleración pobre. Igualmente, los vehículos automáticos también pueden presentar problemas en la caja de cambios y, por lo tanto, deben ser revisados», añade Pardo, que destaca que el precio de esta sustitución es muy elevado y puede conllevar unas nueve horas de trabajo en taller.
También hay que revisar que no haya pérdidas, sobre todo en el líquido refrigerante, ya que se encarga de mantener la temperatura del motor. Lo ideal es cambiarlo cada dos años. Tampoco de líquido de frenos, que se sustituye según indicaciones del fabricante. Con una herramienta específica se puede detectar si ambos líquidos han perdido sus propiedades.
En cuanto a los amortiguadores, pueden verificarse revisando que no hay rastros de aceite aparente en ellos. Si lo hay, deben ser reemplazados.
Norauto aconseja comprobar que tapicería, palanca de cambios, interruptores, salpicadero, anclajes y cinturones están en buen estado, pues son importantes sistemas de seguridad y confort, y comprobar que los testigos de avería en el cuadro se apagan tras unos segundos al poner el contacto.
No se debe olvidar la revisión de luces, parabrisas, si hay golpes de chapa… Hay que tener en cuenta que son puntos en contra de cara a contratar una nueva póliza de seguro, que pueden suponer un detrimento de seguridad y que, por lo tanto, deben repararse.
Norauto aconseja conducir con anterioridad el vehículo que se va a adquirir. De esta forma es posible detectar algunas posibles anomalías, como pueden ser vibraciones, ruidos… son pistas que pueden indicar que hay un fallo o avería del vehículo.
Colaboración con Piqars
En lo que respecta a la revisión posterior, la compañía recomienda aprovechar este control en el taller para llevar a cabo una mejora de consumos y emisiones. Por ejemplo, se puede conseguir que el vehículo contamine hasta un 20% menos y reducir el consumo de combustible hasta el 10% gracias a los Eco Servicios que ofrece Norauto. Además, el vehículo recupera potencia y se mejora la suavidad del motor. En este sentido, además de los servicios de Pre ITV en los que se prepara el automóvil para pasar correctamente esta inspección (un profesional de Norauto se puede encargar de pasar la ITV), la empresa cuenta con el Plan Resiste, dirigido a coches con más de 15 años. Con este servicio, los vehículos reciben el mantenimiento necesario para que puedan seguir circulando en perfecto estado.
Los vehículos de segunda mano que se comercializan deben contar con información transparente (se debe ofrecer el kilometraje, las revisiones que se han realizado, si se ha visto involucrado en algún accidente, entre otras) y estar en perfectas condiciones de seguridad. Por todo ello, Norauto colabora con Piqars, plataforma de subastas de vehículos seminuevos en España que únicamente comercializa una selección de vehículos de segunda mano validados. El vendedor puede verificar con Norauto un total de 67 puntos de control para ofrecer una mayor tranquilidad a los compradores y contar así con un “sello verificado” en su subasta. Con esta verificación se consigue ofrecer vehículos de mayor calidad, mayor valor y más seguros.