La huella de carbono en las instalaciones de ALD Automotive España se redujo el 68% en 2020, prácticamente el doble que en 2019 y en 2018, que lo hizo en un 37%. Esta importante caída, fruto de los esfuerzos de la compañía y restricciones de la pandemia, responde a su firme compromiso en la lucha contra el cambio climático.
ALD, que se estrenó en el calculó de la huella de carbono de sus instalaciones y servicios en 2018, repite ahora para 2019 y 2020, incluyendo, además, las emisiones asociadas a su flota y, por primera vez, las evitadas con la contratación de electricidad 100% renovable en sus centros, así como las emisiones compensadas por el Bosque ALD.
Así, las emisiones de gases con efecto invernadero de ALD en 2019 ascendieron a 348 toneladas equivalentes de CO2, 446.716 toneladas al incorporar la flota de renting, mientras que en 2020 se redujeron a 110 toneladas y 386.951 con flota.
Bosque ALD
El Bosque ALD compensó 37,5 toneladas equivalentes de CO2 en 2019 y 38 toneladas en 2020, y gracias a la contratación de electricidad de origen renovable se evitaron otras 72 toneladas en 2020.
Inaugurado en 2018 y situado en el Parque Regional del Curso Medio del río Guadarrama, en un terreno donado por la Comunidad de Madrid, el Bosque ALD cuenta ya con 300 árboles plantados por la compañía para compensar sus emisiones. Además de restar emisiones de CO2, su objetivo es contribuir también al desarrollo del ecosistema autóctono, proteger la biodiversidad, promover la restauración ecológica, frenar la desertificación y mejorar la calidad de los recursos hídricos.
Cambio de tendencia
Con respecto a 2018, año en el que solo se tuvieron en cuenta las instalaciones, se observaron reducciones sustanciales en las emisiones de alcance 2 y 3. El reparto entre ambos alcances, bastante equilibrado, es similar a lo largo de los tres años analizados, si bien 2019 parece apuntar un cambio de tendencia hacia la reducción de los viajes de negocios en avión, en línea con el objetivo de mejora de la compañía, lo que sitúa las emisiones de alcance 3 por debajo de las de alcance 2 en 2019.
En 2020, con la adquisición de electricidad renovable, las emisiones de alcance 3 vuelven a superar en importancia a las de alcance 2, aunque su reducción es en ambos casos muy significativa a raíz de los confinamientos decretados a causa de la pandemia.
Seguirá mejorando
Aunque con un alcance menos exhaustivo, el cálculo de 2018 se abordó con vocación de mejora y empezaron a ponerse, desde ese mismo año, los medios para reducir las emisiones. Así, el mayor impacto en instalaciones y centros de trabajo vino dado por el consumo eléctrico, los desplazamientos profesionales y el consumo de papel.
El cambio a energía 100% renovable supuso una reducción significativa de las emisiones de alcance 2, que puede mantenerse en el tiempo. En cuanto a la flota, el incremento de vehículos de bajas emisiones favorecerá también la tendencia a la reducción de emisiones, que fue del 13% en esta partida entre 2019 y 2020.
De cara al futuro, la compañía de renting seguirá trabajando en estos ámbitos y ampliará el bosque para compensar las emisiones generadas. Asimismo, estudiará si profundiza en el alcance del análisis incorporando, por ejemplo, datos relativos a la movilidad ordinaria de sus empleados y al impacto relacionado con los proveedores.