Si queremos que los compradores pierdan el miedo a adquirir vehículos eléctricos es necesario acelerar la electrificación y la digitalización del sector del automóvil. Esto permitiría que se desarrollen más rápidamente las infraestructuras necesarias para configurar la red de recarga de alta potencia con capilaridad y capacidad suficientes por todo el país.
Así ha valorado Alberto Teichman, director general de Volkswagen Vehículos Comerciales en España, la situación en la que se encuentra actualmente la industria automotriz y los retos a los que se enfrenta de cara al futuro durante su intervención en el V Encuentro Directivo organizado por la OBS Business School. Según Teichman, estos, sin duda, «estarán marcados por el grado de desarrollo que seamos capaces de alcanzar en materia de electrificación y de digitalización».
Para el director general, durante los últimos cinco años el sector del automóvil ha experimentado un cambio más profundo que el que ha tenido durante las tres últimas décadas. Esto es consecuencia de la actual transformación que vive la sociedad y del hecho de que se «está dando forma a la movilidad del futuro».
Según Teichman, su marca «va a salir reforzada de todo este proceso de transición». En opinión del dirigente de la filial española, la compañía «está trabajando duro para convertirse en la marca de referencia de la movilidad sostenible, tanto en lo referente al transporte de personas como al de mercancías».
En concreto, aludió al «buen momento» que atraviesa el sector de vehículos comerciales. En la época previa al COVID, sus ventas rozaban las 200.000 unidades al año, mientras que de 2020 a 2022 la cifra se redujo hasta las 140.000. Teichman prevé que el mercado «recuperará gran parte del terreno perdido, para alcanzar una velocidad crucero de entorno a las 190.000 unidades en 2025». Personalizando en la situación concreta del área de vehículos comerciales de Volkswagen, está —dijo— «en el mayor ciclo expansivo de producto de la historia de la marca».
Teichman considera «imprescindible» poner a España «a rodar sobre ruedas eléctricas», de modo tal que el país gane en atractivo para los inversores del sector gracias a su avanzado grado de electrificación. Para conseguir tal objetivo, el directivo de la marca alemana propone incrementar la colaboración público-privada y que se busquen mayores objetivos comunes entre las empresas de energía y las de automoción. «Con ello —aseguró— se acortarían los plazos previstos de mejora».
En cuanto a la situación del sector del automóvil en general, Teichman incidió una vez más en la necesidad de que el mercado automovilístico español alcance pronto la velocidad de crucero necesaria para que las inversiones industriales a efectuar en nuestro país resulten verdaderamente interesantes. «El mercado español debería estar entorno a las 1,3 millones de unidades/año, y llevamos muchos años por debajo del millón de vehículos matriculados».
En este sentido, el director general de Volkswagen Vehículos Comerciales considera que 2023 es «un año clave» para el sector del automóvil en nuestro país, porque de perdurar mucho está situación «se está jugando con la supervivencia del llamado milagro español del automóvil».
Finalmente, Teichman recordó la importancia que el desarrollo del PERTE VEC tiene para el futuro de la industria del automóvil española debido al impulso que varios de sus proyectos deben dar a la movilidad eléctrica, entre ellos los auspiciados por el Grupo Volkswagen y sus marcas, entre las que SEAT y Volkswagen tienen previsto efectuar inversiones por valor de 10.000 millones de euros en nuestro país que generarán alrededor de 145.000 nuevos empleos.