La fuerza de las marcas francesas en el mercado de comerciales ligeros de nuestro país hace muy difícil que modelos como la Caddy puedan asaltar el liderato, lo cual no significa que no aspiren a convertirse en una referencia por la calidad y el nivel del producto ofrecido a los profesionales. Esta es un poco la pretensión de Volkswagen Vehículos Comerciales con la quinta generación que ahora se pone a la venta del que puede considerarse como uno de los buques insignia de la división a raíz de los éxitos comerciales cosechados, con más de tres millones de unidades a sus espaldas desde su lanzamiento allá por 1978 o las 30.000 comercializadas en España en estos últimos cinco años, lo que supone en torno al 40% de sus ventas totales de comerciales.
“Creemos que la nueva Caddy nos va a aportar mucho negocio porque viene a competir a un segmento que supone casi la mitad del mercado de comerciales”, afirma Alberto Teichman, director de Volkswagen Vehículos Comerciales. Su previsión es que la nueva generación siga copando ese 40% de las entregas de la marca, un peso algo inferior al del mercado (48%) “aunque para nosotros es positivo ya que no nos hace dependientes de un solo modelo o segmento”, añade el directivo. Las perspectivas iniciales parecen buenas a tenor de los 750 pedidos anotados en la preventa de los pasados meses de noviembre y diciembre.
Tras retroceder un 26,4% durante el pasado año, Teichman pronostica para 2021 un mercado de comerciales ligeros de 180.000 unidades en un contexto de “clara y realista recuperación”, lo que significaría un incremento en torno al 14% respecto a las algo más de 158.000 registradas al término de 2020. “Tenemos indicadores que nos hacen pensar en este crecimiento –declara–. Por un lado, la recuperación económica en la segunda mitad del año. También la reactivación del turismo y en consecuencia del negocio del rent a car, así como el eCommerce, una actividad que tiene una afectación muy especial en nuestro sector y creemos que va a seguir creciendo de manera exponencial”.
A pesar de estos brotes verdes que se atisban, el director de la firma germana reconoce que de momento no piensa para nada en esos 200.000 vehículos que se venían dando desde 2017. De hecho, no duda en señalar como un obstáculo la subida generalizada del impuesto de matriculación por el protocolo WLTP, si bien considera que afectará algo menos en el mercado de comerciales ya que hay una parte, los furgones de la categoría N1, que no están afectados por esta tasa. Pero la incidencia, en su opinión, se ha hecho evidente nada más comenzar el año: “Las ventas de la categoría M1, que es la parte de pasajeros, cayeron un 43% en enero, más alineadas con el descenso de los turimos. Y la parte profesional, la N1, que no paga el impuesto de matriculación, lo ha hecho en un 19%, una diferencia de más de 20 puntos”.
Poco dado a publicitar sus objetivos en números, Teichman sí nos confirma que su pretensión es crecer algo por encima del mercado, con lo que recuperarían un poco el fuelle perdido durante los últimos doce meses, en los que sus entregas se contrajeron hasta las 12.542 unidades tras haber superado la barrera de las 20.000 en el año –de récord– precedente. Para ello, Volkswagen Vehículos Comerciales aprovechará el empuje de la nueva Caddy y el potencial de las nuevas oportunidades de negocio. “La especialización y las soluciones estandarizadas llave en mano que venimos llevando a cabo durante los últimos años nos permite estar preparados para afrontar con mayores garantías el auge del comercio eléctrico y sus necesidades, así que seguiremos apostando por ellas”, explica.
LA FUERZA DE LOS RESIDUALES
El directivo reconoce que el renting se ha convertido en un canal estratégico para la marca. Del total de las entregas de comerciales ligeros que desembocan en las empresas –un 55% del segmento–, el 42% lo hace a través del alquiler con servicios, “una muy buena noticia para nosotros porque pasamos de vender en un guerra de descuentos a vender por cuota, y el hecho de tener el modelo con el mejor residual del mercado con diferencia nos otorga una clara ventaja competitiva sin necesidad de hacer descuentos muy agresivos”. Teichman alude concretamente a los ocho puntos de ventaja en valores residuales con los que se presenta la nueva Caddy en el mercado frente a la media de su competencia, un 45% frente al 37,3%.
Alineado con las previsiones de la AER en cuanto a un crecimiento de las matriculaciones del renting superior al 20% para este año, el ejecutivo vaticina un incremento algo mayor para la parte de comerciales. Volkswagen Vehículos Comerciales alcanzó el ejercicio pasado una cuota del 9,8% en el canal de renting, “un porcentaje muy positivo para nosotros, que nos movemos generalmente en torno al 8%”, afirma Teichman, que considera que con el nuevo Caddy tal vez puedan mejorar algunas décimas, “si bien todo lo que sea alrededor del 10% está muy bien para la marca”, apostilla.
Respecto a la ausencia de una variante cien por cien eléctrica en la gama Caddy, el director de VW Vehículos Comerciales no cree que sea una desventaja competitiva dado el peso aún bajo de estos modelos en el mercado, alrededor del 1%. “Pero tenemos a la expectativa el híbrido enchufable y con los lD.Buzz e ID.Buzz Cargo habrá un antes y un después para nosotros”, matiza. Teichman pone también en valor la propuesta GNC de la Caddy, de la que se vendieron casi 1.000 furgonetas en 2019 y cerca de 700 el año pasado. “Tiene la etiqueta ECO y cumple con las necesidades del cliente en términos de autonomía, así que creemos que es un paso intermedio que ha resultado bastante positivo”, sentencia el directivo.