La Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (Acea) reclama mayores exigencias en la revisión de la Directiva sobre la eficiencia energética de los edificios (EPBD), que forma parte del paquete climático «Fit for 55», para permitir que el mercado de vehículos eléctricos alcance el nivel necesario para cumplir los objetivos de CO2 propuestos para coches y furgonetas.
La patronal europea, que ha acogido con satisfacción la propuesta de la Comisión Europea de revisar dicha Directiva y ha asegurado que su alcance global supone una clara mejora respecto a la Directiva actual, ha mostrado su preocupación en lo referente a edificios que no están sometidos a grandes renovaciones.
Derecho a enchufar
En todos los edificios residenciales existentes, demanda Acea, los usuarios de vehículos electrificados deben poder instalar puntos de recarga sin grandes obstáculos administrativos, el denominado «derecho a enchufar». Asimismo, ha declarado que falta ambición para los edificios (tanto residenciales como no residenciales) que están siendo sometidos a grandes renovaciones y, en general, para equipar las plazas de aparcamiento con puntos de recarga.
Por ello, Acea recomienda que se establezcan objetivos claros para los tres tipos de edificios (los existentes, los que se están renovando a fondo y los nuevos), con el fin de acelerar la preparación de los mismos para cargar la futura ola de vehículos eléctricos.
Esta propuesta, que se centra en los requisitos de tarificación privada/no pública en los edificios existentes y nuevos, complementa la propuesta de Reglamento sobre infraestructuras de combustibles alternativos (AFIR).
